Lo que Monitor de Geoingeniería no es: Estelas químicas (chemtrails) y negacionismo climático

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Hay una teoría conspirativa que afirma que las estelas de vapor de larga duración que dejan los aviones, a menudo denominadas «estelas químicas», contienen sustancias nocivas que son liberadas intencionadamente en la atmósfera con fines diversos y a menudo secretos. Esta teoría infundada asocia erróneamente estas estelas de vapor con la modificación del clima y la geoingeniería solar. Nuestro trabajo en el Monitor de Geoingeniería no tiene ninguna relación con tales afirmaciones, ni respalda ni da credibilidad alguna a estas teorías infundadas.

Un desafortunado efecto secundario que tiene el aumento de las referencias a los «chemtrails» en Internet es que el término geoingeniería se utiliza erróneamente para referirse a estas teorías conspirativas que hablan de una modificación meteorológica encubierta a gran escala. Esto significa que parte de la información disponible en Internet (sobre todo en las redes sociales) que hace referencia a la geoingeniería, se basa más en especulaciones que en investigaciones y hechos comprobados.

Aunque el discurso de los chemtrails podría reflejar una desconfianza legítima hacia ciertos actores gubernamentales y la transparencia en la toma de decisiones – y, de hecho, los proyectos reales de modificación del clima si pueden plantear riesgos para las comunidades y el medio ambiente-, lo que hacen es promover la oposición a la geoingeniería basada en afirmaciones infundadas. Esto desacredita el trabajo serio contra una serie de proyectos reales de geoingeniería que están llevando a cabo comunidades y organizaciones en muchas regiones del mundo.

Además, gran parte de la información en lnternet relacionada con los chemtrails y las teorías conspirativas sobre la modificación del clima estan ligadas a agendas políticas profundamente discriminatorias y racistas que no buscan ni son compatibles con la justicia climática. Estas teorías conspirativas suelen ir de la mano del negacionismo climático, lo que socava aún más la comprensión de la crisis climática y de las soluciones reales a la misma.

Aunque las investigaciones y publicaciones de Monitor de Geoingeniería nunca han aportado pruebas que apoyen las teorías conspirativas de los chemtrails o de la modificación del clima, nuestros recursos se citan a veces como prueba de que estas teorías deben ser ciertas. Por lo tanto, recomendamos encarecidamente a todos nuestros lectores que examinen detenidamente nuestras publicaciones antes de establecer cualquier vínculo con tales teorías conspirativas y las políticas a las que suelen estar asociadas.

Hay ya mucho por lo que alarmarse mirando los hechos verificados y la investigación seria sobre geoingeniería; todos y todas deberíamos empezar por ahí.